Roberto Bautista: Cuando la realidad supera los sueños.

Estos días en los que hemos disfrutado con el tenis de Roberto Bautista en Wimbledon levantándonos los pelos de punta en más de una ocasión al presenciar lo difícil que se lo estaba poniendo en las semifinales, en la catedral del tenis, al actual número 1 del mundo, me vinieron innumerables recuerdos de su época de junior a profesional.

En aquella época, yo estaba entrenando y viajando con varios jugadores de edades similares a la del castellonense (Nacho Coll, Pedro Clar, Pablo Martín Adalia, Agustín Boje, Andoni Vivanco, Guillermo Alcaide,...) así que fueron muchas las veces que coincidimos durante esos años.
En una ocasión tuve una conversación a solas con él que recuerdo en especial, y que cobra más fuerza viendo dónde está ahora mismo Roberto (a las puertas de ser top 10 mundial). Sería a mediados del año 2010 o 2011 no lo recuerdo exactamente, pero sí sé que el lugar era en el ATP Challenger de Fürth, Alemania. Roberto tendría unos 23 años y estaba rondando el puesto 160 en la clasificación ATP.
En una de esas mañanas en Fürth, desayunamos Roberto, Esteban Carril (su coach en aquella época), Guillermo Alcaide (con quien yo viajaba) y un servidor. Esteban y Guillermo subieron antes a sus respectivas habitaciones y Roberto y yo nos quedamos un rato a solas charlando. Hacía tiempo que no coincidíamos, yo habitualmente viajaba más en torneos Futures, entonces le pregunté qué tal le iba todo y si jugando cuadros finales de ATP Challengers prácticamente cada semana ya tenía más ingresos que gastos.
Su claridad al responderme me dejó sorprendido pero con muy buen sabor de boca ya que compartía totalmente lo que me dijo. Vi que estaba totalmente convencido y que seguramente gracias a esta contundencia en su respuesta daría el salto que le faltaba para consolidarse en la primera división del tenis profesional ATP y ganarse bien la vida como tenista profesional.
Me dijo: “Toni, las semanas que me va bien los ingresos son un poco más altos que los gastos. La semana que no me va bien pierdo dinero, pero tanto yo como mis padres tenemos claro que hasta el último momento lo que ingrese lo vamos a dedicar a mi formación tenística; por eso cada semana intento viajar con coach aun suponiéndome un gasto más. Lo intentaré así durante todo lo que queda de año. Si no doy el salto a los torneos ATP me iré para casa pero sabiendo que en todo momento lo he intentado al máximo. Lo que no voy a hacer es empezar a hacer las cosas a medias, viajando mucho tiempo solo únicamente para ahora ahorrar dinero. Terminar el año con balance económico positivo no es ahora mi prioridad, lo que sí que no quiero es que le cueste ya más dinero a mis padres pero todo lo que ingreso ahora mismo lo estoy invirtiendo en mi tenis y no quiero quedarme estancado en los Challengers”. Ya es por conocido por todos ustedes cómo transcurrió la historia en años posteriores.
Pienso que Bautista es un gran ejemplo de perseverancia, constancia, profesionalidad. Ya con 14 años apuntaba muy alto ganando el Máster Nike del circuito a nivel mundial. Quizás fuera por el peso de esa medalla junto con las expectativas creadas… pero su etapa de los 16 a los 23/24 años no fue un camino de rosas. Cierto es que según tengo entendido durante unos años los sponsors estuvieron ahí apoyando, pero también creo que sus últimos años antes de dar el salto a profesional la mayoría ya no estaban.
A pesar de todo, Roberto siguió en el camino y sin duda es un ejemplo más de que los sueños con una gran dosis de pasión, con un mínimo de talento y rodeado de un grupo de personas con el mismo enfoque llegan a convertirse una realidad e incluso en ocasiones la realidad termina superando los sueños. Enhorabuena Robert!!!